Según recuerda Cashin, Norman Foster se unió a una ruta ciclista campo a través, con antiguos atletas olímpicos y profesionales. Conociendo a Norman Foster sólo por su reputación, Cashin y sus compañeros se preguntaban si aguantaría el recorrido. A pesar de la larga ruta, Norman Foster mantuvo el ritmo durante todo el recorrido, lo que llevó a algunos a preguntarse: «¿te lo puedes creer?».

El nuevo cobertizo para embarcaciones de la organización sin ánimo de lucro Row New York es un proyecto en el que Cashin estuvo muy involucrado. En un principio, Cashin preveía una estructura utilitaria, pero recuerda que amplió el alcance del proyecto para crear «el mejor cobertizo para embarcaciones del mundo». Cuando se dirigió a Norman Foster para que diseñara el edificio, éste declaró que nunca había trabajado en este tipo de edificios, pero que estaba «dispuesto a pensarlo».

El diseño resultante superó con creces las expectativas de Cashin: «Nunca se ha visto nada igual», afirma. Esta incorporación polivalente a las orillas del río Hudson actuará como «faro» y «punto de encuentro» para el barrio. Creado para la organización sin ánimo de lucro Row New York, Cashin explica cómo el exigente rigor y la energía del remo pueden ayudar a los niños desfavorecidos a adquirir aptitudes para la vida que mejoren sus perspectivas de educación superior.