Este proyecto nació en 2010 cuando Norman Foster dio su conferencia inaugural como Humanitas Visiting Professor de la Universidad de Oxford, donde hizo hincapié en la difícil situación del catorce por ciento de la humanidad, más de mil millones de personas, que viven en asentamientos o barrios marginales, sin acceso a agua potable, saneamiento o energía para calentar, encender o cocinar. A no ser que este tema sea abordado, en 2050 uno de cada tres habitantes de la población mundial vivirá en estas condiciones.

En esta charla, Foster desafió el enfoque convencional de arrasar con todo como poco realista. En cambio, sugirió que se respetaran las estructuras sociales dentro de estas comunidades y que, a través de un proceso de mejoramiento del barrio, pudieran transformarse desde dentro. Las nuevas tecnologías en la gestión de la energía y los desechos serían centrales para este proceso.

Posteriormente, Foster desarrolló este concepto con la Fundación y compartió sus visiones con el Sr. Ratan Tata. El resultado, siete años después, es una serie de proyectos de regeneración de barrios en la provincia india de Odisha a través de una colaboración entre la Norman Foster Foundation y Tata trusts, trabajando junto con el gobierno provincial.

Parte del concepto es la distribución de los derechos de la tierra a los habitantes de barrios marginales. En una ceremonia celebrada en Odisha en la primavera de 2018, Norman Foster junto con el Honorable Ministro Shri Naveen Patnaik y Ratan Tata entregaron certificados de propiedad a los habitantes de los barrios marginales para iniciar el proceso de transformación. Debido a su escala de tiempo inmediata, este grupo de proyectos tiene sus raíces en las tecnologías existentes.

El equipo de la NFF estableció una presencia en la región y trabajó con los grupos de interés separados en los asentamientos en un enfoque de abajo hacia arriba para identificar sus aspiraciones en términos de espacio público, instalaciones, paisajismo, edificios e infraestructura. A través de este proceso de consultas, exposiciones y reuniones al estilo de los ayuntamientos, se llegó a un consenso sobre la planificación. En el espacio de no mucho más de un año, la implementación del plan maestro estaba bien encaminada con la pavimentación de nuevas rutas, espacios públicos y parques infantiles. También se iniciaron obras vitales en la infraestructura de saneamiento y energía.

En este punto, a principios de año, las implicaciones de COVID-19 comenzaban a sentirse a nivel mundial y en India. Dada la gravedad de la situación, Tata Trusts decidió concentrar sus actividades a nivel nacional en la lucha contra la pandemia y, dados los riesgos de contagio, el equipo de la NFF también interrumpió su participación.

El proyecto fue reconocido con un Premio Mundial del Hábitat en 2019. Había creado un modelo que era escalable y podía ser replicado, pero sobre todo validó la proposición de que muchos de estos asentamientos eran comunidades de esperanza y no desesperación.